Después de su muerte, el tercer hijo de Tolkien, Christopher, publicó una serie de obras basadas en las amplias notas y manuscritos inéditos de su padre, entre ellos El Silmarillion y Los hijos de Húrin. Estos, junto con El hobbit y El Señor de los Anillos, forman un cuerpo conectado de cuentos, poemas, historias de ficción, idiomas inventados y ensayos literarios sobre un mundo imaginado llamado Arda, y más extensamente sobre el continente conocido como la Tierra Media. Entre 1951 y 1955, Tolkien aplicó la palabra legendarium a la mayor parte de estos escritos.
Si bien otros escritores precedieron a Tolkien en el género literario de fantasía, el gran éxito de El hobbit y El Señor de los Anillos cuando se publicaron en Estados Unidos condujo directamente al resurgimiento popular del género. Esto ha causado que Tolkien sea identificado popularmente como «el padre» de la literatura moderna de fantasía, o más concretamente, de la alta fantasía. Los trabajos de Tolkien han inspirado muchas otras obras de fantasía y han tenido un efecto duradero en todo el campo. En 2008, el periódico The Times le clasificó sexto en una lista de «Los 50 escritores británicos más grandes desde 1945».
Hija natural y huérfana a los catorce, conoció a Ronald Tolkien, también huérfano, y se enamoró de él siendo inquilinos de la misma casa. Pese a las dificultades y restricciones del tutor de Ronald, se comprometieron al alcanzar el segundo la mayoría de edad. Se casaron, y su matrimonio no estuvo exento de dificultades: a los tres meses de la boda, él tuvo que embarcarse hacia las trincheras del Somme, de donde regresó enfermo y marcado por la impresión; Ronald presionó a Edith para que se convirtiera al catolicismo antes de la boda, siendo ella anglicana, lo que generó tensiones en la pareja que duraron años; al contrario que su marido, no era una intelectual, por lo que padecía en el ambiente académico de Oxford; y Edith consideraba a C. S. Lewis, íntimo amigo de Ronald, «un intruso en su familia», celosa de que le prestase más atención que a ella.